HomeKolón | Novela | Imágenes | Biografo| Críticas|
Capítulo XII
Palabra de Dios
|
De "...lo que no se puede hablar, hay que callar, por que las palabras son de los dioses." La palabra en un principio no estaba entre los hombres; sí las risas y los gritos. Cuando Amaunac apareció en lo alto del volcán, el hombre escuchó palabras por primera vez: "Las palabras son de los dioses" dijo Amaunac y luego corrió un viento caliente y denso que dejo nuestros cuerpos lubricados. Un viejo gritó, pero su grito se transformó en una voz ronca y profunda que dijo: Las palabras son de los dioses. Después el viejo tomó una filosa varilla y azotó a unos hombres que copulaban bestialmente a la luz del día. Los fornicadores convertidos en monos fueron ofrendados a Amaunac.
|
|