Novelas que se escriben en Mendoza extraido de www.proyectodesiertos.8k.com. Recomiendo su visita
por todos sus contenidos sobre la obra de Raul Silanes.

 

De Kolón a Los días del Venado

Por Raúl Silanes

Para ubicarnos en lo que hace a las intenciones de la presente nota, debo mencionar antes que nada y por sobre toda suspicacia, que intento enfocar la atención sobre la novelística mendocina, variada tanto en calidad como en cantidad, en el pasado y en el presente: es saludable un debate sobre lo que se escribe en Mendoza, para las obras y el conocimiento de las mismas.

Esta provincia ha dado novelistas que van de Antonio Di Benedetto (Zama) hasta Julio Semoloni (Antinovela), desde Draghi Lucero (La cabra de plata) hasta Alberto Rodriguez (Matar la tierra), Iverna Codina (La enlutada), Rolando Concatti (Nos habíamos jugado tanto), Mercedes Fernández (El jardín del infierno), Gladys Guerrero (Los amantes de Baudelaire), Jorge Oviedo (El viejo), Abelardo Arias (Alamos talados), Raúl Lilloy (Kolón), Liliana Bodoc (Los días del venado), etc. Además de aquellos autores que, por razones de espacio, injustamente debo dejar fuera de esta breve mención.

Entre todos conforman una serie de puntos de vista que representan el núcleo de eso tan difuso que podríamos llamar "identidad mendocina". De una u otra manera, con su aporte han ampliado el límite de la escritura de largo aliento en Mendoza, pero al mismo tiempo han dibujado los obstáculos que deberán enfrentar las nuevas generaciones de novelistas, en lo que hace a estilos, formas, etc.

Encontramos en estas obras nuestros elementos climáticos y culturales inconfundibles, personajes arquetípicos, mitos y leyendas, hechos que nos conmovieron, etc. Pero hasta la aparición de la citada "Kolón" (Raúl Lilloy), no podíamos decir que en Mendoza contáramos con una obra relacionada al género de la épica fantástica..

Épica fantástica en Mendoza:

En este punto deseo detenerme un momento, para señalar que Liliana Bodoc (Los días del Venado) afirma en un reportaje :"Quise hacer una alegoría de la conquista española….". Por las características del material existente sobre este género en Argentina, quien lea el libro de Bodoc recordará de inmediato a Tolkien o a Rowling (esta última, desde el punto de vista de su éxito comercial, ya que a raíz de ella resurge un interés "masivo" por el género). Sin embargo, el que ha tenido la oportunidad de leer "Kolón" de Lilloy, reconoce de inmediato como punto de partida, un "parentesco de género" entre las dos obras, en el campo de la épica fantástica latinoamericana. Además "Kolón" (1996) es la primera novela que hace épica fantástica de la conquista americana y le sigue, en lo que a aparición editorial se refiere, "Los días del venado" (2000).

Kolón y Los días del Venado:

Por su parte, "Kolón" de Raúl Lilloy, es un relato mítico que ofrece varios niveles y accesos de lectura. Quienes tomamos contacto con él, ni siquiera estamos promediando el camino entre su futuro probable, el año 3492, y su pasado referencial, 1492, que Lilloy recrea en sus contenidos míticos. Pero, a diferencia de otra novela evocadora del descubrimiento de lo que se dio en llamar el Nuevo Mundo (la citada "Los perros del Paraíso", de Abel Posse), la mitificación de Lilloy deja suspendido el discurso del pasado en un futuro probable. A su vez esta supresión del tiempo es cuestionada por la presencia de personajes que no pueden despojarse de su identidad, como Kolón, Cortés, Pinzón y algunos otros, que llegan desde el futuro y fuerzan una revisión del pasado.

Así, con una prosa que introduce numerosos registros, Lilloy apela en muchos pasajes al imaginario surrealista, concretando una disección del relato racionalizado de aquello que tuvo lugar en la historia. De esa manera somete su mundo de ficción, desbordante de contradicciones y oscuridades, a la opresión de una deidad que reclama abusos tan crueles como delirantes. Dinamiza "la estructura congelada" del mito, con una alta dosis de erotismo, que parece justificar la realización de los destinos trágicos. La violencia ritual, relacionada con el hecho de ejecutar sacrificios humanos, permite al autor desplegar una dialéctica emparentada a lo peor de nuestros años setenta.

Antecedentes y conocimiento:

Sin lugar a dudas "Kolón" es una obra muy particular, con nulos antecedentes en Argentina, tanto por su carácter de hipermedia (así está construida la narración), como por su ejercicio de la épica fantástica, en el contexto específico de la conquista española en América. Su poca notoriedad nacional, tal vez pueda explicarse por haber incursionado en un género extraño al lector medio argentino, como es el uso de la hipermedia. Aún así, parece altamente probable que Liliana Bodoc haya leído la novela de Lilloy. Basamos esta conjetura en que ella es profesora de Literatura, ambos autores pertenecen a la misma generación, estudiaron en la misma universidad (UNC), viven en Mendoza, etc. En otras palabras, sería extraño que Bodoc no haya leído a su coterráneo y contemporáneo, además de ser un antecedente en el género que eligió.

Agreguemos que Kolón fue lanzada en Mendoza (1996) con amplia repercusión periodística local, presentada en la librería más grande de la ciudad en ese momento, por quien esto escribe, Jaime Correas (Uno), Andrés Cáceres (Los Andes), Alejandro Crimi (Revista Diógenes), Luis Triviño (ex rector UNC, actual subsecretario de Educación Especial) y Julio Rudman (crítico especializado). "Kolón" es la primera novela mendocina en Internet (Kolón.freeservers.com) con más de 800 visitas. Y subrayemos que la novelística de estos últimos años en Mendoza no ha tenido muchos protagonistas: desde 1996 registramos las novelas de Concatti, Semoloni, Gladys Guerrero y muy poco más.

Parentescos y diferencias:

"Kolón" tiene interesantes parentescos pero también importantes diferencias con "Los días del Venado". Entre las diferencias a simple vista notamos la forma de implementar imágenes: Lilloy produce una extrañeza plástica determinada. La raíz de dicha extrañeza es una natural resistencia aceptar nuevos paradigmas estructurales en la literatura (que en este caso provienen de la informática), del mismo modo que el cine implicó una nueva forma de escritura. Este nuevo modelo es la hipermedia y la épica fantástica es el género que mejor se acomoda a su estructura.

Otra diferencia fácil de advertir entre ambos libros es el nivel poético de las imágenes narrativas de Lilloy, lo que le hace más explícito a la hora de relatar batallas, ritos y amores.

Pero al estudiar las estructuras surgen semejanzas interesantes. Las dos narraciones evocan a dos pueblos con antagonismos religiosos, que se unen para ir a una batalla final. En ambos casos está la conquista de América como trasfondo. También se presentan de manera arquetípica Hernán Cortes y Colon. Juntar en un mismo relato a Colon y Cortes es otra particularidad de las dos obras. La huella del pie que no figura en ninguna crónica histórica y que cita y desarrolla Lilloy ampliamente, Bodoc la hace intervenir de manera plástica en su narración. Más coincidencias: la batalla final en "Kolón" termina con la derrota de Cortes, huida a Siberia, posterior retorno y muerte de Cortes; en "Los días del venado", Leogros es derrotado y retorna a la tierra de los sideresios.

No sabemos como sigue la saga de Bodoc, pero partiendo de las similitudes citadas, predecirmos que Leogros vuelve, es derrotado y muere como el Cortés de Lilloy.

Grilla de recurrencias

Con el objeto de visualizar más claramente un posible conjunto de influencias que se presentan entre las obras "Kolón" y "Los días del venado", he diseñado un "cuadro comparativo" elemental. El mismo nos permite detectar parecidos estructurales entre las dos obras que, como dice Eugenia Joaquín Pardo, "no solo debemos analizar aquello que respecta a una total coincidencia de letra por letra. Además es necesario realizar un análisis comparativo que comprenda las estructuras textuales".

Siguiendo la metodología propuesta por esta autora, hemos hecho una lectura comparativa de textos, que comprende tanto sus relaciones internas como las que corresponden a las condiciones sociales e históricas que reproducen. Esto quiere decir que también debemos analizar el diseño conceptual, la ambientación y los personajes.

Junto con esta nota ofrecemos una especie de "Cuadro Comparativo", donde aparecen algunas coincidencias argumentales entre Bodoc y Lilloy, teniendo en cuenta que el resumen de dos novelas de estas características, nunca pasa de ser una serie de afirmaciones cuya interpretación puede resultar engañosa.

Argumentos, caracteres y personajes

La primera relación posible que podemos establecer entre "Los días del venado" y "Kolón", es que en ambas novelas hay estructura y personajes similares. Hay dos pueblos con cosmogonías religiosas opuestas, con líderes que se enfrentan en una batalla final. Sin embargo debe advertirse que el papel del sexo, la violencia, el poder desmesurado, se remarca de manera ostensible en "Kolón".

De la misma forma agregamos que tal vez algunos puntos (hay muchos detalles como para enumerarlos en esta nota, pero no por ello desprovistos de interés) pertenezcan a una determinada tradición narrativa, o a la misma realidad histórica. De momento y mientras ignoremos si Bodoc hizo o no la lectura de Lilloy, es aconsejable hablar de una sugestiva recurrencia estructural y temática entre dos ficciones que, al indagar el origen y el destino del hombre hispanoamericano, pueden entretejer un determinado número de coincidencias, atribuibles al ambiguo campo de las similitudes.
En buena hora si esta nota despierta el interés de los lectores por todas las obras mencionadas en particular y por la literatura mendocina en general, ya que habremos logrado el objetivo central: que sean leídos los autores locales. Pero además y sobre todo, es necesario un debate que enfoque a las obras en su conjunto. En este sentido, sería saludable para la literatura escrita en Mendoza que ambos escritores (Raúl Lilloy y Liliana Bodoc) pudiesen debatir públicamente sobre las "similitudes" o "coincidencias" de sus obras, sobre los antecedentes a que echaron mano al elaborar sus narraciones, etc.; detalles de dos ficciones que aportan vitalidad a la novelística hecha en Mendoza.

La invitación está planteada: para alentar la lectura y para acercar el autor al lector. Espero que esto se concrete, ya que estamos hablando de dos bellas novelas, de las que estamos orgullosos, tanto los lectores como sus autores.

PARENTESCOS Y SIMILITUDES

Tema

Kolón (1996)

Los días del Venado (200)

Título de capítulos Tiempos antiguos, 41 (Relato mítico del pasado) Los hechos antiguos, 93 (Relato mítico del pasado)

Género

Épica fantástica

Épica fantástica.

Concepción del tiempo

Ucronía (un tiempo que no es tiempo).

Ucronía.

Origen del autor

Mendoza

Mendoza

Estudios

UNC

UNC

Astrólogos y astrónomos

Astrólogo con funciones mágicas, relaciona el cosmos con el porvenir de los hombres.

Astrónomos que son en realidad astrólogos (p. 53/55): relación mágica con las estrellas y adivinan el porvenir.

Uso de la K

Personaje principal es Kolón, con recurrencias al mundo kafkiano.

Personajes importantes empiezan con K: Vieja Kush, Kuy Kuyen, Kume, Kupuka, etc.

Lucha irreconciliable entre dos pueblos

Iberianos y silonitas, pag. 41. Uno de los pueblos se retira.

Cofradias del recinto y del aire libre, p. 179/182. Uno de los pueblos se retira.

Cortes y Leogros coinciden vestimenta y roles, no en historia real.

Cortes es jefe de caballeros negros. (No es Cortes histórico). "Cortes cruzó flameando su capa negra…", p. 27

Leogros es como el Cortés de la novela Kolón, y no como el de la historia. Es jefe de "hombres de negro y capa..", p. 202

Cortes/Leogros

(orígenes divinos)

Cortes desciende de Amaunac, dios perverso: "...es descendiente directo de Amaunac", p. 28

Los sideresios, el pueblo de origen de Leogros, fueron creados por Misaianes un dios del mal y la oscuridad, p.172

Antihéroes

Kolón termina siendo héroe a pesar de él mismo, p.291.

"... se resisten a ser héroes, pero terminan siéndolo a su pesar y con miedo", explica Bodoc.

Magia I

La magia es el eje de la novela Kolón.

"La magia es eje vertebral de la novela…", Bodoc a Revista Nueva.

Magia II

Hay dos magias opuestas, p. 41 y subsig.

"...la oposición entre dos magias", Bodoc a Nueva.

Actitud hacia los animales.

Los Iberianos sacrifican monos por sentirlos como ellos, p. 41.

Los del aire libre trata a las criaturas como hermanos, p.183

Los que llegan son...

Caballeros negros en caballos, p.257.

Hombres de negro en caballos, p.202

Tema huella de sus pies

Cortan "trozo de tierra con su memorable huella", varias pag.

"La huella de sus pies", titulo p.202, y subsig.

Los que vienen

Siberianos

Sideresios, p. 214

Pirámides

Existen. "Kristobal llegó a lo más alto de la piramide", p.267.

"… el doctrinador permanecía en la pirámide gris…", p.215.

Hay guerra final entre dos pueblos

Entre los silonitas y los iberianos.

Entre los sideresios y los huasihuilkes, pag. 219

En pirámide llena de muertos...

Allí "los silonitas sólo encuentran cadáveres.", p. 290.

Encuentran pirámide con guardias asesinados", p. 228.

Huida final...

Cortes huye derrotado. Luego vuelve y muere en batalla.

Leogros huye derrotado. ¿Volverá y morirá en batalla?